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CORREO POR AUTOMOVIL

Entre las muchos aportes que el presidente Dr. Alfonso Quiñónez Molina realizó durante su mandato estuvo el enorme desarrollo de la red de carreteras. Basta con revisar rápidamente los Diarios Oficiales de 1925 a 1927 para comprender la magnitud del trabajo realizado y su contribución al mejoramiento de las actividades comerciales.

 

En el manifiesto que fuera leído por su persona, el siguiente párrafo resume la importancia que en su proyecto presidencial tenían el desarrollo de las vías de comunicación:

 

Caminos y más caminos hacen prosperar a las naciones, porque por ellos no sólo corre el torrente humano compenetrándose, amándose y engrandeciéndose, sino que también fluyen por allí, como ríos, los productos de la tierra que el trabajo hace producir cuando sabe que no se quedarán con escaso o ningún valor en las trojes o las bodegas; y esas sendas, que son, además, como brazos que se mueven diligentes en señal de fuerza, llegan al corazón de los poblados y al tocárselos los despierta al movimiento, que es la vida pletórica de sangre renovada todos los días.

 

El primer viaje de servicio de automóvil, de Guatemala a El Salvador, sobre la entonces recién terminada carretera, fue registrado el 28 de diciembre de 1923. Un mes antes, el 22 de noviembre del mismo año, El Salvador había realizado un viaje de prueba desde Santa Ana a la Ciudad de Guatemala, con la expectativa de inaugurar luego el servicio regular para pasajeros.

El 10 de enero de 1926, el Diario Oficial de El Salvador publicó el "Reglamento para la Circulación de Vehículos y Peatones", el cual contenía XV capítulos y una extensión de siete páginas.El 8 de febrero de 1926, la Secretaría de Gobernación publicó el siguiente decreto en el Diario Oficial de El Salvador:

 

El Poder Ejecutivo,

 

     CONSIDERANDO: que es conveniente establecer el mayor número de vías rápidas o extraordinarias en el servicio de Correos de la República, a fin de favorecer lo más posible los intereses del público en general y en particular los del Comercio; -a iniciativa de la Dirección General de Correos,

 

       DECRETA:

     Art. 1o. -Establécese el servicio diario, en automóvil, de conducción de correspondencia entre esta República y la de Guatemala, siendo la misma vía para la conducción de correspondencia a cursar por Puerto Barrios.

 

     Art. 2o. -Para sufragar, en parte, los gastos que ocasionará este servicio especial, grávase toda pieza de correspondencia que se remita por esta ruta, con cinco centavos para los países de la Unión Postal Panamericana (México, Brasil, Estados Unidos de América, República Dominicana, Cuba, Argentina, uruguay, Paraguay, Ecuador, Panamá, Guatemala, Bolivia y España) y diez centavos para la correspodencia de los países no enumerados.

 

     Art. 3o. -El producto de esta sobre-tasa, destínase exclusivamente para completar el pago del servicio indicado, mientras se promulga la próxima Ley de Presupuesto.

 

     Art. 4o. -El presente Decreto comenzará a surtir sus efectos desde la fecha de su publicación en el "Diario Oficial".

 

     Dado en el Palacio Nacional; San Salvador, a los ocho días del mes de febrero de mil novecientos veintiséis.

 

     Alfonso Quiñónez M.

El primer despacho de correo por automóvil se programó para el 17 de febrero de 1926. Tal como había sido especificado en el decreto publicado el 8 de febrero del mismo año, las rutas para las que se habilitó el servicio fueron Guatemala & Puerto Barrios. El día de los despachos se trasladó de sábado a miércoles. 

 

Existen sobres con indicaciones "Via Auto" con cancelaciones postales de 1925. En las MEMORIAS DE GOBERNACION, FOMENTO Y AGRICULTURA DE 1925 se hacía mención de despachos diarios a Guatemala por ese medio. Los siguientes sobres son ejemplos de piezas con marcas postales (relativas al uso de automóvil), las cuales eran manuscritas, mecanografiadas o estampadas con sellos no oficiales:

En las MEMORIAS DE GOBERNACION, FOMENTO Y AGRICULTURA DE 1925, presentadas el 2 de marzo de 1926 a la Honorable Asamblea Nacional Legislativa, por el Ing. Don Marcos A. Letona, se lee:

(...) A Guatemala se hacen despachos diarios desde Santa Ana, por la vía de automóviles, para cuyo efecto se ha celebrado la contrata respectiva con la Empresa Sobalvarro Hermanos, propietarios del Garage Internacional de aquella capital. Con Honduras y Nicaragua también se ha mejorado el servicio, pues los contratistas postales que hacen la trayectoria del Golfo de Fonseca, han adquirido vaporcitos rápidos y seguros, que prestan toda eficiencia. 

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